Desde hace 10 días que el Sindicato de los camioneros mantienen bloqueada la entrada dos distribuidores de alimentos ubicadas en la localidad de San Pedro provincia de Buenos Aires. El gremio de Moyano exige que los trabajadores afiliados al Sindicato de los Empelados de Comercio pasen a formar parte del de ellos. Las compañías estiman que las pérdidas que este conflicto les ocasiona ascienden a $15.000.
Los camioneros mantienen bloqueadas empresas de alimentos desde hace 10 días, exigiendo que los trabajadores de esos establecimientos, encuadrados en el sindicato del gremio delos mercantiles, pasen a formar parte del sindicato de Hugo Moyano, líder de la Confederación General del Trabajo, CGT.
Esteban Greco, dueño de la distribuidora del mismo nombre, señaló al Diario la Nación que: «No dejan entrar ni salir ningún camión. No se puede creer la soberbia sindical con la que actúan».
El propietario de una de las empresas afectadas y presidente del Centro de Comercio e Industria de San Pedro, denunció, además, que los referentes de los camioneros «nos amenazaron, con prepotencia, con que nos van a sacar las empresas si no arreglamos».
El matutino señala que este conflicto, que básicamente se trata sobre en que convenio de trabajo se los debe encuadrar a estos empleados, comenzó hace más de una semana.
Inicialmente fueron cinco las empresas bloqueadas por el gremio de camioneros:
- Distribuidora Greco.
- Distribuidora Echevarría.
- Frigorífico Friducar.
- Corralón de materiales Peiro.
- Corralón de materiales Romero.
Se encuentran afectados unos 70 trabajadores que no podían ingresar en sus puestos laborales.
Pero luego de arduas negociaciones tres delas empresas, el frigorífico y los dos corralones, llegaron a un acuerdo «equilibrado», debido a que los empresarios les permitieron a sus empelados que pasaran al sindicato que reclama, de acuerdo a lo informado por Julio Cabaleiro, secretario de los Camioneros regionales.
El sindicalista agregó que: «Hace seis meses los mismos empleados vinieron a buscar nuestro apoyo porque los explotan. Tenemos documentos firmados por ellos. Incluso, están amenazados por los dueños. Les dijeron que si daban a conocer públicamente la protesta, los iban a echar».
Mientras que las distribuidoras, se quejan de grandes pérdidas económicas, ya que los productos que comercializan son, en su mayoría, perecederos. Los dueños estiman que las pérdidas ocasionadas entre fueron $10.000 y $15.000 desde el inicio de este conflicto.
