Un fenómeno astronómico que ocurre cada 2.737 años, tendrá lugar hoy lunes, 3 de diciembre de 2012, y se trata de la alineación de los planetas, Venus, Saturno y Mercurio coincidirán perfectamente en su posición con las pirámides de Guiza. En esta oportunidad la triangulación, acontecerá dieciocho (18) días antes de la finalización del calendario Maya, del 21/12/12, que algunos anuncian se producirá el fin del Mundo, antes de iniciarse la Nueva Era.
El 3 de Diciembre de 2012, las pirámides de Guiza coincidirán con la alineación planetaria perfecta con Saturno, Venus y Mercurio.
Sucede que la antiguas culturas tenían fascinación con los planetas. Por lo tanto, mirando el cielo construían los calendarios, esculturas y templo, relacionándolos con el Sol, Estrellas, Satélites y Planetas.
Los estudiosos del tema, dicen que las pirámides de Egipto fueron construidas en honor a la Constelación de Orión, formado por las estrellas brillantes Alnitak, Alnilam y Mintaka, sin embargo, este lunes 03/12/12 las pirámides de Guiza coincidirán con la alineación planetaria que tendrán Saturno, Venus y Mercurio.
Las pirámides que fueron construidas por los faraones de la cuarta dinastía Keops, Kefrén y Micerino se encuentran en la Necrópolis de Guiza aproximadamente a unos 20 kilómetros de El Cairo en Egipto.
Hoy, 3 de diciembre de 2012, se dará la alineación Planetaria perfecta entre la Gran Pirámide de Guiza (Mercurio), Pirámide de Jafra (Venus) y la Pirámide de Menkaura (Saturno). Esto se calcula con software especializados como el Stellarum, donde observando desde el aire se ven a las pirámides de Guiza desde al aire, exactamente alineadas de la misma manera en que lo estarán Saturno, Venus y Mercurio en el año 2012.
Este fenómeno astronómico ocurrirá a tan sólo 18 días del 21 de diciembre de 2012, fecha en la cual, finaliza el Calendario Maya. son muchos los que aprovechan este acontecimiento y dicen que es el día el Fin del Mundo o muchos Cambios en la nueva Era. Mientras que, los científicos aseguran que este evento se debe a la gran admiración que tenían los egipcios por las estrellas, al igual que otras culturas ancestrales.
