Pablo Micheli, secretario general de la Central de Trabajadores de Argentina, CTA, confirmó la realización de un paro general de actividades para la segunda quincena del mes de agosto a realizarse conjuntamente con la Confederación General del Trabajo, CGT, Azopardo y la CGT Azul y Blanca. El gremialista aseguró que «durante la Copa no tenía sentido», pero la cantidad de suspensiones y despidos ameritan una nueva protesta.
Finalizado el mundial las centrales de los trabajadores se unen y realizaran una medida de fuerza para mediados de agosto próximo, entre las razones enumeradas de los reclamos esta la modificación del Impuesto a las Ganancias sobre los sueldos y los ingresos que no le alcanzan para cubrir la canasta familiar.
Micheli ayer martes en declaraciones a radio Rivadavia manifestó que:
- «Durante el Mundial no tenía sentido, pero la situación amerita que vayamos a un paro nuevamente, por la gravedad de la situación que está peor y no tiende a normalizarse».
- «Cada vez hay más suspensiones y más despidos, agravado porque aquellos que no quieren abandonar su única fuente de ingreso se ven impedidos porque la gendarmería custodia las fábricas para que los trabajadores no puedan ingresar».
- «Todo esto hace un cuadro que nos lleva a reiterar que el paro, convocado por las CGT y la CTA, va a ser durante la primera quincena de agosto».
