Luego de que el 31 de diciembre de 2016 haya vencido la prórroga que el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner había otorgado, la administración de Mauricio Macri tomó la determinación de eliminar la devolución del IVA por compras con tarjetas de crédito. El reintegro del Impuesto al Valor Agregado comenzó a regir en 2001 y, hasta el momento, era renovado cada año.
La planilla de gastos tributarios del Presupuesto 2017 que fue aprobada por el Congreso Nacional y promulgada por el Poder Ejecutivo contemplaba la «Devolución parcial del IVA incluido en las compras con tarjetas de débito». A pesar de ello, el Gobierno decidió no renovar el beneficio dado que consideran que el costo fiscal era alto y no cumplía con el objetivo de fomentar el uso de dicho medio de pago.
De esta manera, el Estado desea compensar el costo que representa la reforma del Impuesto a las Ganancias.
El reintegro representó una inversión de 4.535 millones de pesos en 2015 y de 6.077 millones de pesos para 2016. Para el corriente año se preveían 7.511 millones de pesos.
El reintegro del IVA era aplicado de forma ininterrumpida desde noviembre de 2001. De la mano del mismo, los consumidores finales que pagaban sus compras de bienes muebles o contrataciones de servicios con tarjeta de débito obtenían un 5% del Impuesto al Valor Agregado de las mismas.
Por otro lado, sigue vigente la devolución del 15% del IVA a jubilados, pensionados y titulares de la Asignación Universal por Hijo (AUH). Este beneficio otorgado por la Ley 27.253 se otorga siempre y cuando se hagan compras en comercios minoristas con las tarjetas de débito asociadas a la cuenta bancaria en la que se perciben los haberes mensualmente.
