Un reciente fallo del Juzgado Multifueros de El Bolsón marcó un precedente clave al determinar que la Asignación Universal por Hijo (AUH) y la Tarjeta Alimentar no pueden considerarse parte de la cuota alimentaria. Es decir, las asistencias pagadas por Anses no eximen a los progenitores del cumplimiento de sus obligaciones.
La causa judicial se originó tras la denuncia de una madre que sostuvo económicamente sola a su hijo. La mujer relató que el padre no colaboraba de manera regular ni participaba activamente en la crianza.
El progenitor pretendía que la AUH y la Tarjeta Alimentar cubrieran parte de su obligación alimentaria.
AUH no puede ser considerada parte de la cuota alimentaria
La jueza que intervino rechazó esa interpretación y fijó una cuota mensual basada en la canasta de crianza publicada por el Indec, correspondiente a la franja etaria de 6 a 12 años. Según el fallo, estos beneficios sociales tienen un carácter asistencial y no pueden reemplazar la obligación del padre de contribuir al sostenimiento de su hijo.
Durante el proceso judicial, la madre demostró ser la única responsable de las tareas diarias de cuidado, incluyendo la alimentación, la escolaridad, el transporte y la salud del niño. Además, acreditó que cursa estudios universitarios y que sufrió una pérdida económica significativa debido a un incendio en su lugar de trabajo.
Por su parte, el padre alegó que no tenía ingresos fijos y ofreció una cuota de $150.000. Argumentó que, sumando la AUH y la Tarjeta Alimentar, su contribución era suficiente. Sin embargo, no presentó pruebas de sus ingresos ni documentación que respaldara su situación económica.
Los pagos de Anses no reemplazan la obligación parental
La jueza enfatizó que la AUH y la Tarjeta Alimentar son derechos otorgados por Anses al niño. Por ello, no deben considerarse como parte del esfuerzo económico del progenitor.
En consecuencia, fijó que la cuota alimentaria deberá cubrir la totalidad de la canasta de crianza y estará vigente hasta que el menor cumpla 21 años, salvo modificación judicial.
Este fallo refuerza la idea de que las transferencias sociales no pueden ser utilizadas para disminuir la responsabilidad económica de los padres. Además, sienta una base legal importante para futuras disputas alimentarias en las que se intente justificar una menor contribución por el cobro de la AUH.
