El Gobierno de Javier Milei presentó un ambicioso proyecto de reforma educativa que busca reemplazar la normativa vigente desde 2006. Bajo el nombre de «Ley de Libertad Educativa», la iniciativa elaborada por La Libertad Avanza propone profundas transformaciones en el sistema educativo argentino.
Vales educativos de la reforma educativa
Uno de los puntos más destacados de la reforma educativa es la implementación de un sistema de financiamiento basado en la demanda. De sancionarse la ley, el Estado otorgaría vales, bonos o becas directamente a las familias para que puedan elegir en qué escuela inscribir a sus hijos, sean estas públicas o privadas.
El texto evita utilizar la palabra «voucher». Sin embargo, el artículo 83 habilita estos instrumentos, buscando garantizar que la libertad de elección no dependa del nivel socioeconómico.
Además, la reforma educativa establece que cualquier institución que reciba fondos públicos deberá rendir cuentas anualmente, publicar su información de gestión y someterse a auditorías de organismos como la Auditoría General de la Nación (AGN), la Sindicatura General de la Nación (SIGEN) y el Ministerio de Capital Humano.
Recordemos que Capital Humano actualmente cuenta con el programa de asistencia vouchers educativos. Mediante el mismo se otorga una asistencia económica para que las familias de la clase media envíen a sus hijos a colegios privados.
Nuevas formas de escolarización
Otro eje central del proyecto es la validación formal de nuevas modalidades educativas. La ley reconoce oficialmente la educación en casa o homeschooling, permitiendo a los padres enseñar a sus hijos o designar a otra persona para hacerlo. No obstante, los estudiantes deberán inscribirse en el sistema educativo y rendir evaluaciones regulares para validar sus conocimientos.
También se incluyen otras formas como la escolarización híbrida, comunitaria, domiciliaria y a distancia. Según el artículo 49 de la reforma educativa, todas deberán ajustarse a criterios de supervisión y evaluación que garanticen estándares nacionales.
Evaluaciones de la reforma educativa
La reforma educativa impulsa un sistema nacional de evaluación con pruebas censales y muestrales para obtener información continua sobre aprendizajes y trayectorias escolares. Asimismo, se propone la publicación de los resultados por escuela, algo que hasta hoy está prohibido.
Se crea además el Examen Nacional de Educación Secundaria (ENES), una evaluación voluntaria y anual destinada a quienes finalicen la secundaria. Este examen cubrirá Lengua, Matemática, Ciencias Naturales, Ciencias Sociales y Humanidades. Su objetivo es ofrecer una referencia nacional para estudiantes, familias y el sistema educativo en su conjunto.
Participación familiar
La reforma educativa refuerza el papel de las familias como actores centrales del proceso formativo. Plantea la creación de consejos de padres en las escuelas públicas, con funciones consultivas y de acompañamiento institucional. Además, las instituciones ganan autonomía para definir su proyecto pedagógico, métodos de enseñanza y calendario escolar, dentro de un marco normativo nacional.
En paralelo, el proyecto busca declarar a la educación como un servicio esencial. Esto implicaría que, ante medidas de fuerza gremiales, debe garantizarse una prestación mínima que asegure el derecho de los estudiantes a recibir clases.
Bajar texto del proyecto de ley de la reforma educativa en formato PDF.

