El día de ayer, jueves 8 de agosto de 2013, el Banco Central de la República Argentina, BCRA, para aumentar la bancarización y flexibilizar el efectivo disponible en bancos, lanzó dos medidas. Por un lado, dispone que a partir del 1° de septiembre, las transferencias electrónicas serán gratuitas e inmediatas para montos de hasta $20.000 por día y la otra aprobó una norma por la cual se permite a las entidades financieras deducir de la exigencia de Efectivo Mínimo de sus tesoros del «consumo» de billetes que efectúan los clientes desde los cajeros automáticos.
El Directorio del Banco Central adoptó dos medidas orientadas a estimular la bancarización.
Por lo tanto, los clientes de los bancos podrán desde el 1° de septiembre, realizar las transferencias electrónicas de hasta $20.000.- de manera gratis e inmediatas.
Únicamente será para clientes que operen mediante los cajeros automáticos, home banking y terminales de autoservicio.
En la actualidad, las transferencias electrónicas diarias de hasta $10.000.-no tienen costo y se realizan en forma inmediata.
Otra de las normas que lanzó el BCRA es para favorecer las recargas en los Cajeros y es la que les permite a las entidades financieras a deducir de la exigencia de Efectivo Mínimo de sus tesoros del «consumo» de billetes que efectúan los clientes desde los cajeros automáticos.
Fuentes del BCRA indicaron que: «Este consumo estará calculado como la diferencia entre el saldo remanente en los cajeros y el monto con el que se lo recarga».
Esta medida ya se puso en vigencia a partir del 1º de agosto, y tiene la finalidad aumentar el grado de bancarización, ponderando más aquellas zonas que están menos alcanzadas por el sistema bancario.
Se dispondrá de mayores cargas en los cajeros automáticos según el lugar que fueron instalados. Únicamente aplicables a cajeros «abiertos», es decir, disponibles para todo el público y no así para aquellos donde las entidades establecen como de uso exclusivo de sus clientes.
La explicación desde el central es que la medida aprobada consiste en una deducción en la exigencia de efectivo mínimo asociada al monto «consumido» de los cajeros automáticos, deducción que, a su vez, variará según la zona en la cual esté ubicado como así también se tendrá en cuenta si dicho cajero se encuentra dentro o fuera de la sucursal.
