En la Capital Federal habrá multas caras, el jueves será votado el proyecto que acordaron en la Legislatura Porteña que modifica el sistema. Se cobrará de multa $360 por usar celular al manejar actualmente se cobra $100.- y prácticamente este monto es el importe mínimo a cobrar por distintas infracciones, con un máximo de $1.000.-. Las multas cuya prescripción o vencimiento operan a los dos años solamente prescribirán si no se cometen más infracciones.
La reforma al Código de Faltas porteño propone un aumento generalizado de las multas de tránsito, las que, no tendrán montos mínimos y máximos, sino un valor fijo. El impacto más fuerte lo sentirán los conductores que cuando manejen usen su Celular, la cual pasará de $100.- a $360.- Para conductores con licencia de conducir de profesionales, taxis, colectiveros el valor se eleva a $720.-, el doble.
La prescripción y vencimientos de las multas, también será modificado de manera sustancial en el nuevo proyecto. Ya que si bien el plazo continua siendo de dos años, pero será interrumpido si comete otra infracción. Cuando el infractor opte por realizar el pago voluntariamente dentro de los 40 días, se le realizará un descuento del 50%.
En la actualidad, el Código de Faltas dice que se debe sancionar al conductor de un vehículo:
«manipulando teléfonos celulares o utilizando auriculares conectados a equipos reproductores de sonido».
Desde la Legislatura porteña explican que la infracción se debe al manejar con una sola mano y no por el echo de hablar, por lo que la infracción corresponde cuando el conductor habla con el teléfono en la mano, y no se debería hacer multa a los que usan sistemas de manos libres.
Pero algunos funcionarios no lo entienden así y dicen que se debe sancionar a todos, debido a que cuando alguien habla aún con “manos libres” se distrae y no se concentra en el manejo de automóvil. De esta manera la falta queda a criterio de cada inspector.
Martín Borrelli, legislador macrista, aseguró que: «Queremos abandonar el sistema por el cual las multas tienen una escala que queda a criterio de cada controlador. Es un reclamo de sucesivos gobiernos. Queremos pasar a un sistema sin escalas, siguiendo el criterio del scoring. Eso favorece el conocimiento de la ley y su difusión».
El tema más problemático a tratar de la reforma es la prescripción de las multas, el plazo de la misma continuara en dos años pero será interrumpido con «la comisión de una nueva infracción». Hasta el momento, el vencimiento pierde la vigencia con la citación «fehacientemente notificada» o con una sentencia condenatoria de parte de la Justicia. Con el cambio, el Estado esquiva la responsabilidad de notificar a los infractores. Son muchas las personas, que optan por no pagar y esperan la prescripción. Pro lo que, el año pasado fueron más de 2.500.000 infracciones las que se dieron de baja.
Este es el tema que la minoría más critica. Un legislador oficialista admitió que: «Al decir que el mero labrado de una infracción interrumpe la prescripción, se puede pensar que hay una presunción de culpabilidad, porque en realidad no se sabe si es culpable», inmediatamente, Gerardo Ingaramo del PRO, le respondió que: «La prescripción es un beneficio, pero no puede ser para quien comete infracciones».
El pago voluntario de la multa abonándola dentro de los primeros 40 días recibirá un descuento del50% de la multa, cuando ahora es del 25%. Daniel Presti, subsecretario de Justicia porteño, afirmó que: «Con el nuevo sistema, el pago voluntario se aplicará a todas las infracciones, salvo el exceso de velocidad y cruzar un semáforo en rojo».. de esta manera, realizando un pago voluntario ya no habrá necesidad de concurrir ante un controlador de faltas, explicando desde la Legislatura que: «Implicará no perder tiempo y desde la Administración evitar el dispendio innecesario de actividad».
