Gran polémica se desato en la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires pero el Código de Faltas porteño ya prevé las multas para los peatones imprudentes, las cuales se podrían hacer efectivas. Los expertos en la Seguridad Vial critican fuertemente la medida pero antes de aplicarlas se haría una campaña e concientización. Desde el Ejecutivo se equipara algunos cruces conflictivos con rejas y sendas seguras.
Según revelaciones realizadas por Guillermo Montenegro, ministro de Seguridad, durante las jornadas realizadas de seguridad vial, el Gobierno de la Ciudad comenzará a aplicar sanciones a los peatones imprudentes, que ya están previstas en el Código de Faltas entre $25.- y $100.- para los que cruzan la calle en forma incorrecta, esquivar por los autos y camiones, a un peatón que cruza mal es una verdadera hazaña.
La advertencia de los expertos es que antes de sancionar y aplicar multas hay que hacer campañas de concientización. Por lo que Montenegro señalo que:
- «Pensamos profundizar las políticas de seguridad vial, durante las jornadas de educación vial ‘Los niños en la conducción’-. En ese sentido, creemos que, como existen conductores imprudentes capaces de ocasionar un accidente, también hay peatones que por imprudencia pueden ocasionar un siniestro».
Según lo que establece, el Régimen de Faltas porteño establece que:
«el peatón que cruce calles o avenidas por lugares no habilitados o no respete las luces del semáforo que permitan el cruce al mismo, es sancionado con multa de $ 25 a $ 100».
Si bien esta establecido las sanciones no fueron aplicadas jamás. Solamente en el año 2005 en la gestión de Aníbal Ibarra como jefe de Gobierno, por algún tiempo la Guardia Urbana labró «multas didácticas». Se trataba de un formulario que se le entregaba al peatón infractor indicándole qué había hecho mal. La Guardia también se hizo famosa por retar a la gente que cruzaba en rojo o que se paraba sobre la calzada.
En la actualidad, desde el Ministerio de Justicia se esta estudiando la puesta en marcha de multas efectivas. El proceso sería gradual. Según trascendió, la intención oficial es poner el foco en zonas conflictivas, como Plaza Constitución. Primero pondrían reductores de velocidad, rejas y sendas peatonales, para generar cruces seguros. Después, harían una campaña de concientización. Como último paso se aplicarían las multas. Se encuentran, analizando alternativas para identificar a los peatones infractores en el momento o para hacerlo llevándolos a una fiscalía contravencional.
Según cifras oficiales, en la mitad de los accidentes viales hay peatones involucrados. De acuerdo al Gobierno porteño, este año murieron un 48% menos de peatones que en 2008, pero aún así siguen representando el 44% de las víctimas del tránsito.
Eduardo Bertotti, titular del ISEV, opinó que: «El peatón es el elemento más débil del tránsito y no estoy de acuerdo en que las sanciones recaigan sobre él . En cambio, el automovilista está aportando un riesgo. Hay que pensar para qué se quiere la ciudad: si vamos a privilegiar al auto o al peatón».
Alberto Silveira, de Luchemos por la Vida, observó: «Es verdad que los peatones son permanentes transgresores, pero no es el momento de sancionarlos. Primero, hay que hacer una campaña de concientización. Además, para que el peatón sienta a la sanción como legítima tiene que saber que los automovilistas también están siendo sancionados por sus transgresiones».
Gustavo Brambati, gerente de Seguridad Vial de Cesvi, dijo que: «Va a ser difícil la aplicación de la multa. Algunos países utilizan las sanciones morales para ridiculizar al infractor. Por otra parte, las campañas de seguridad vial actuales no involucran a los peatones. Hay que invertir mucho para cambiar su actitud».
Clarín
