La Administración Federal de los Ingresos Públicos, AFIP, como querellante impulsó una investigación judicial a través del Tribunal Oral Penal Económico Número 2, acreditando que los cuatro condenados, habían abusado de los beneficios de una promoción industrial y concretado una maniobra delictiva utilizando facturas apócrifas, resultando penas de hasta cuatro años de prisión efectiva por el delito de evasión agravada a las cuatro personas.
Desde la AFIP, precisaron que los cuatros condenados son los empresarios Héctor Granata y Alberto Silveyra, sentenciados a cuatro años; y Malena Kosik y Silvana Tiraborelli a tres años y seis meses de cárcel, por evasión de impuestos por una cifra superior a los 6 millones de pesos.
Ellos fueron directivos del grupo Multiser, compuesto en su mayoría por empresas de servicios, integrado por las compañías Tecnobra, Save Computación, Develop, Desilta, 10 Servicios Empresarios, Asagrol, Cibus Coerces y Olici.
La AFIP impulso una investigación como querellante en la causa, pudiendo acreditar que los condenados, hicieron abuso de los beneficios de una promoción industrial, concretaron la maniobra delictiva a través de la utilización de facturas apócrifas.
Durante el juicio, luego de varias audiencias donde circularon más de 100 testigos y documentación que fue aportada por el organismo fiscal, como así también la producción de varias pericias contables, se pudo determinar que todas estas compañías eran, en realidad, una sola unidad económica.
La AFIP durante los años 1996 al 1999 realizo investigación del caso y comenzó el proceso judicial en el año 2004.
El organismo fiscal a fines del año pasado en la “causa Ken” condeno a dos personas por evasión fiscal agravada, por el delito de abuso ilegitimo en un régimen promocional industrial, hasta tres años de prisión.
Clarín
