El Ministerio de Salud de la Nación en el año 2006 promovió que las mujeres de entre 15 y hasta 39 años debían vacunarse contra la rubéola y ahora en los meses de octubre y noviembre deben vacunarse los hombres de 16 a 39 años de edad, ya que según informó el doctor Enrique Casanueva, Jefe del Servicio de Infectología Infantil del Hospital Universitario Austral «Los hombres pueden contraer la rubéola y contagiar a las embarazadas, con lo cual no alcanzaba solamente con vacunar a las mujeres «.
El doctor aclaró que en el 20 al 50% de los casos esta enfermedad viral aguda no da síntomas es transmitida por la saliva que se elimina al hablar o al toser o por objetos contaminados y que «la mitad de los infectados no tiene manifestaciones, o la enfermedad es confundida con otras».
El peligro radica en los bebes por nacer, por lo que las embarazadas deben tener sumo cuidado ya que la rubéola se manifiesta de modo más maligno. Si la embarazada contrae el virus, éste puede producirle al feto el Síndrome de Rubéola Congénita, cuyas consecuencias abarcan desde la muerte fetal, hasta sordera, cardiopatías, ceguera, retardo mental y malformaciones.
El propósito del Ministerio es eliminar definitivamente la infección del país . Para esto, lanzó el 29 de septiembre la campaña de vacunación nacional para los hombres -«reducir la rubéola congénita es también su responsabilidad, no sólo la de las mujeres», y para las mujeres que no se vacunaron en el 2006 y que no están embarazadas en este momento.
«Todavía falta bastante para erradicar al virus», advierte el especialista. Una de las fallas sigue siendo la desinformación: » Muchas personas no se vacunan porque no perciben a la rubéola como un problema . Como en los adultos y en los chicos no es grave, no es vista con miedo. El peligro es la salud de los chicos que nacen.
