El día de mañana, el Presidente Mauricio Macri realizará un muy esperado anuncio que contempla un paquete de medidas. Además del relanzamiento de los Créditos ANSES y un programa de beneficios destinado a los titulares de prestaciones liquidadas por la Administración Nacional de la Seguridad Social, el Jefe de Estado anunciaría un nuevo plan de facilidades de pago a 5 años para regularizar deudas con la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP).
Durante el pasado fin de semana, el titular de AFIP, Leandro Cuccioli, diseñó un nuevo plan de facilidades de pago que discutió esta tarde con Mauricio Macri, quien lo anunciaría este miércoles.
La presión impositiva es una de las mayores críticas que los contribuyentes le realizan al actual Gobierno. Por lo cual es uno de los puntos que el mandatario tiene en cuenta en miras de las elecciones nacionales del mes de octubre de 2019.
El nuevo plan de pago de AFIP no se tratará de una moratoria dado que ello requeriría un tratamiento por parte del Congreso y el presidente no quiere declinaciones en referencia al tema.
Según lo trascendido, el plan de facilidades de pago sería a cinco años con una tasa de interés similar a a actual, la cual es del 3% mensual para los contribuyentes cumplidores y del 4,7% mensual para los morosos.
Aún no trascendió cuál será el monto del anticipo que tienen que pagar los contribuyentes para acceder al beneficio. El mismo podría ser de entre el 10% y el 15% de la deuda total.
Con esta medida no sólo los contribuyentes se beneficiarán en poder financiar sus deudas. El Fisco Nacional intentará una recomposición de la recaudación impositiva, la cual viene cayendo 10% en términos reales poniendo en riesgo las metas fijadas por el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Recientemente, el FMI efectuó una serie de recomendaciones al Gobierno reclamando una mayor dureza impositiva. Entre otras cosas recomendó la eliminación de las exenciones del Impuesto al Valor Agregado (IVA) que se aplica a los productores de alimentos que integran la canasta básica, algo que, obviamente, molestaría a empresarios y sindicalistas.
