La Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires ha recibido un proyecto de ley para que se realice una extensión de la Licencia por Paternidad a 45 días que el oficialismo elaboró de forma conjunta al Partido Socialista (PS). La iniciativa propone que los empelados públicos porteños puedan quedarse en su hogar con su familia por dicho plazo a lo largo del primer año de vida de su hijo.
Realizadno una ampliación de la licencia por paternidad se reduce la diferencia de tiempo que se pueden tomar los hombres y las mujeres por el nacimiento o la adopción de su hijo. De esta manera se fortalece el lazo entre el padre con su familia.
En referencia a esta iniciativa, el Jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, recalcó que la maternidad no debe ser un freno para el crecimiento o la inserción laboral de la mujer.
La licencia actual que establece la ley vigente es de hasta 12 jornadas con goce de sueldo para los trabajadores del Estado Porteño. La iniciativa propone que este plazo se eleve a 15.
Además, a lo largo del primer año del recién nacido, el progenitor no gestante podría solicitar 30 días extra, los cuales serán exclusivos e intransferibles.
Por otro lado, el proyecto no busca modificar la licencia por maternidad, la cual es de entre cuatro a cinco meses y medio dependiendo del cargo que ocurre el trabajador.
Fomentando la copaternidad, el proyecto indica que la mujer tendrá la posibilidad de transferir los últimos 30 días de su licencia al hombre para ser ella quien regrese al trabajo antes de tiempo. Aparte, en caso de querer tomarlos, ambos padres podrán elegir cuál de los dos será el que se tome los 120 días extra sin remuneración, beneficio que actualmente únicamente corresponde a la madre.
En la adopción, los días podrán ser distribuidos entre los padres dependiendo de su criterio. Si se adopta un niño de más edad se agregarán días a la licencia, contando con un máximo de 90 adicionales para los chicos mayores de 10 años.
Obviamente, la distribución indicada en la normativa solamente es válida en caso de que ambos padres sean empleados públicos de la Ciudad de Buenos Aires. Esto incluye a los docentes y profesionales de la salud dejando fuera al de las fuerzas de seguridad, quienes sólo gozarían de la nueva legislación para la licencia por adopción.
