El Gobierno de Javier Milei presentó en el Senado su esperado proyecto de reforma laboral, bajo el título «Ley de Modernización Laboral». La iniciativa, que forma parte de su plan de desregulación del mercado, propone modificar numerosos aspectos del régimen vigente con el objetivo de promover el empleo formal en el sector privado.
La reforma laboral impacta tanto a los actuales trabajadores en relación de dependencia como a quienes ingresen al mercado laboral en el futuro. No obstante, varios de los artículos propuestos han generado controversia por los cambios que implican en derechos adquiridos.
El texto completo del proyecto ya se encuentra disponible en el sitio oficial del Senado. Por ello, los ciudadanos pueden descargar el texto de la reforma laboral en formato PDF.
Cambios de la reforma laboral en indemnizaciones y salarios
Uno de los puntos centrales del proyecto es la modificación del sistema de indemnizaciones por despido. Se excluyen del cálculo habitual conceptos como aguinaldo, vacaciones, propinas y premios. A su vez, se habilita a las Pequeñas y medianas empresas (Pymes) a abonar la indemnización en cuotas.
Además, se propone la creación de los Fondos de Asistencia Laboral (FAL), financiados con un aporte obligatorio del 3% de las remuneraciones sujetas a aportes patronales. Si se sanciona la reforma laboral, estos fondos serán administrados por entidades financieras habilitadas por la Comisión Nacional de Valores (CNV).
En relación con los salarios, se habilita el pago en moneda extranjera, en especie (como alimentos o vivienda) y a través de cuentas virtuales (CVU), lo que elimina la exclusividad de las cuentas bancarias (CBU). El proyecto introduce el «salario dinámico», que podrá variar según la productividad o el mérito individual, incluso por decisión unilateral del empleador.
Flexibilización de jornada, licencias y vacaciones
La reforma busca flexibilizar la jornada laboral legal. Establece la posibilidad de extenderla de 8 a 12 horas diarias por acuerdo entre las partes. No obstante, se deben respetar los descansos mínimos de 12 horas entre jornada y 35 horas semanales.
Además, habilita el uso de un «banco de horas» para compensar días de mayor carga con otros de menor duración.
Respecto a las vacaciones, se permite fraccionarlas en períodos de al menos 7 días y otorgarlas en cualquier momento del año, sin necesidad de acuerdo sindical. El empleador deberá comunicarlo con una anticipación mínima de 30 días. Se garantiza que al menos una vez cada tres años los trabajadores puedan tomar vacaciones en temporada de verano.
También se incorpora una cláusula que autoriza la reducción salarial para empleados que se reincorporen tras una enfermedad o accidente inculpable. Si la empresa no puede reubicarlos, el contrato quedará extinguido con derecho a indemnización.
Juicios laborales
Uno de los aspectos más polémicos del proyecto de la reforma laboral es la limitación al reclamo judicial. El texto establece que el cobro de salarios, indemnizaciones u otros beneficios será incompatible con acciones por daños y perjuicios según el Código Civil y Comercial. Es decir, aceptar un beneficio implicaría la renuncia automática a otras vías de reclamo.
Esto podría traducirse en una menor capacidad de los trabajadores para acudir a la Justicia ante situaciones de abuso o incumplimientos laborales, lo cual genera preocupación en ámbitos gremiales y jurídicos.
Teletrabajo y contratos parciales
La reforma laboral también dispone la derogación de la Ley de Teletrabajo, sancionada durante la pandemia de Covid-19. Esta norma había establecido derechos y obligaciones específicas para quienes trabajan de forma remota, incluyendo la desconexión digital y la provisión de elementos de trabajo por parte del empleador.
Por otro lado, se incorporan los contratos a tiempo parcial, definidos como aquellos en los que el trabajador presta servicios por menos horas que la jornada legal o convencional. Estos empleados podrán realizar horas suplementarias hasta completar la jornada legal, y sus sueldos se calcularán proporcionalmente.
