Varios dirigentes de ambas Confederaciones Generales del Trabajo, CGT, oficialista y opositoras, volvieron a coincidir con que Juan Carlos Schmid, jefe del gremio de Dragado y Balizamiento, sea el líder de la central de trabajadores unificada, que se tratara de armar luego de que pasen las elecciones legislativas. Ante la falta de respuesta concretas por parte del Gobierno Nacional, los sindicalistas dialogan para unificar las CGT, para darle mas fuerza a los reclamos de los trabajadores y buscan acordar quien será al dirigente general.
En las últimas semanas silenciosamente se vienen reuniendo dirigentes como Gerardo Martínez, del sector de los albañiles Unión Obrera de la Construcción, UOCRA, Andrés Rodríguez, de la Unión Personal Civil de la Nación, UPCN, estatales y Oscar Lescano de Luz y Fuerza, donde el nombre del portuario Juan Carlos Schmid resonó con fuerza.
Juan Carlos Schmid, titular del gremio de Dragado y Balizamiento y hombre allegado a Hugo Moyano, líder de la CGT opositora, el año pasado ya había sido tenido en cuenta momentos antes de la ruptura que dio origen a que actualmente haya dos centrales obreras, como un eventual candidato de consenso para mantener una sola unidad que finalmente no se concretó.
Para unificar nuevamente la CGT con la conducción de Antonio Caló, el metalúrgico y titular de la CGT oficialista, no resultaría algo viable. Tampoco se aceptaría de forma unánime que la cabeza fuese Hugo Moyano.
A Antonio Caló le recriminan no poder en su gestión hacerle frente a Cristina Fernández, Presidente, ya que en el plano gremial se tuvo que conformar con dos decretos que la mandataria difundió para eximir del impuesto a las Ganancias el pago de las dos cuotas del aguinaldo, que no modificaron las escalas ni tampoco el Mínimo no Imponible al mismo criterio que se logró en las paritarias salariales. Tampoco consiguió respuestas a la demandas por las Asignaciones Familiares ni el pago de la deuda a las obras sociales.
Por otra parte el liderazgo de Moyano no será nunca bien visto por su mala relación con los denominados los “gordos”, luego de varios años de destrato mutuo y de constate desconfianza. Como así tampoco aceptarían este líder sus ex aliados, encabezados por el taxista Omar Viviani, ni los «independientes» Andrés Rodríguez, Gerardo Martínez y José Luis Lingeri (Obras Sanitarias), que apuestan a mantener su alianza con el Gobierno hasta 2015, más allá del resultado electoral de octubre.
En dialogo con Ámbito Financiero, Juan Carlos Schmid reconoció que su nombre sonó de manera recurrente como posible prenda de unidad de la CGT, incluso en los últimos meses.
«No es un secreto que mantengo diálogo con muchos dirigentes, como los ‘independientes’ y Lescano. Pero es muy prematuro hablar de eso. Además, se sabe que no es habitual que la cabeza de la central esté en un gremio chico».
